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Rosamar Briceño, February 27 2019

Edificios inteligentes y los beneficios que nos aportan

El desarrollo acelerado de la tecnología en los últimos años ha impactado en mayor o menor grado a todos los aspectos de la vida moderna.  Los edificios y viviendas también se han visto beneficiados por la innovación tecnológica, con el objetivo de generar mayor ahorro de energía y de ser más limpios.

Habitar un edificio inteligente ha sido un sueño acariciado por los seres humanos y muy frecuente en las historias de ciencia ficción.  Afortunadamente, la tecnología aplicada a la industria de la construcción ha traído a la realidad algunos de estos sueños y la innovación continúa.

El concepto de edificio inteligente se da en la convergencia de la electricidad con la electrónica, la computación y los sistemas de comunicaciones y se remonta a los años 70’s en donde la computación, las redes de comunicaciones y la electrónica tuvieron avances muy significativos.  La domótica agrupa a todos los sistemas que permiten automatizar un edificio. 

Para lograr la comunicación e integración de los diversos dispositivos participantes en el sistema, se estandarizaron códigos, los cuales son conocidos como protocolos. El primer protocolo fue creado por Pico Electronics of Glenrothes, Escocia en 1978 y es el protocolo X-10, el cual utiliza la línea eléctrica (220V o 110V AC) para la transmisión de señales.  Este protocolo continúa vigente, sobretodo en Estados Unidos y Europa.

La búsqueda se enfocó en interconectar las redes eléctrica, de agua, gas, cable telefónico, coaxial y redes hertzianas.

Protocolos de comunicación para redes de control y automatización con mayor alcance, fueron diseñados, como KNX que surgió en 2002 en Bruselas. LonTalk que evolucionó a LonWorks el cual es considerado un estándar europeo para la domótica (norma EN 14908) y reconocido mundialmente desde 2005.  Al mismo tiempo se crearon diversos protocolos creados por las marcas propietarias, como Cardio (Secant), HAI, Creston.

En 2006 los sistemas domóticos integraron RF (radio frecuencia), con protocolos como ZigBee, Z-Wave. Posteriormente surgieron sistemas complementarios como Somfy, que automatiza persianas y puertas.

¿Qué es un edificio inteligente? 

          Un edificio inteligente es aquel que cuenta con una serie de tecnologías avanzadas que permiten automatizar funciones como: Iluminación, temperatura, uso de la energía eléctrica, video-vigilancia, comunicaciones unificadas, multimedia, controles de acceso, para que, a través de una administración integrada y control automatizado, se logren mejorar su eficiencia energética, su seguridad, su comodidad y su accesibilidad.  

Eficiencia: El ahorro energético es la máxima preocupación de quien administra los gastos de una propiedad y es un tema que tiene solución. Los edificios inteligentes son la clave para la eficiencia energética, desde su propia concepción, construcción y estructura y las soluciones que desarrolla gracias a las nuevas tecnologías.  Produce un consumo eficiente o desarrolla iniciativas sustentables que repercuten en la capacidad del propio edificio para autoabastecerse de su propia energía, generar y ahorrar recursos. Es importante que todo edificio inteligente cuente con un certificado de eficiencia energética.

Un edificio inteligente cuenta con sistemas que le permiten la administración, el control integrado y automatizado para aumentar la eficiencia energética, seguridad, usabilidad y accesibilidad. Control de clima (termostatos), desconexión de equipos, medidores, tarificadores de consumo de energía son sólo algunas actividades de control que se pueden realizar en un edificio inteligente.

Conectividad: Es uno de los beneficios clave ya que permite unir a las personas y hacer la vida más fácil a los residentes. Los edificios inteligentes se conectan con su entorno y permiten mejorar la comunicación tanto desde el punto de vista interno, como con su entorno urbano. Contar con una excelente cobertura en todas las áreas, con enlaces a Internet robustos y un sistemas de comunicaciones unificadas hacen la diferencia.

Seguridad: Un edificio inteligente cuenta con sistemas de seguridad innovadores e integrados, permitiendo que los residentes controlen quien puede entrar a su espacio, ya sea su hogar, oficina, local, con ayuda de la tecnología, monitoreando todo lo que sucede para evitar posibles intrusos, proteger la propiedad cuando el inquilino o propietario se encuentran ausentes, controlar persianas con un horario, para abrirse o cerrarse por la mañana o la tarde y encender algunas de las luces por intervalos durante la noche. La seguridad en un edificio inteligente abarca soluciones de automatización que dan la protección contra robo, equipo contra incendios, contra choques eléctricos, contra cortos circuitos, detectores de humo, sensores de humedad, sensores de movimiento, monitoreo, control de accesos, control de iluminación.  Un edificio inteligente brinda un entorno de seguridad y tranquilidad.

Accesibilidad: Otra característica clave que distingue a un edificio inteligente y lo prepara para las ciudades del futuro, es tener un espacio que sea accesible incluyendo a personas con movilidad reducida. La accesibilidad en el transporte no solo debe de ser para automóviles o transporte público, instalando ascensores espaciosos o que esté adaptado para personas invidentes, con movilidad reducida, o personas de la tercera edad, sensores de presencia para que las luces se enciendan y se apaguen cuando se necesita, todo esto es una prioridad para una calidad mejor de vida.

Comodidad: Quién imaginaba que desde un dispositivo móvil se puede controlar todo el entorno? Los edificios inteligentes, además de buscar la eficiencia energética siendo lo más respetuosos posible con el medio ambiente, buscan también la comodidad, facilidad y confort del usuario, adaptándose a sus necesidades, lo principal es crear una atmósfera más confortable. La creación de ambientes con sistemas de audio, video y la iluminación adecuada, en exteriores como en interiores, junto con la decoración adecuada, generan la calidez en los espacios que encanta y sorprende a los usuarios.

La aplicación de la tecnología en los edificios inteligentes continúa evolucionando rápidamente en los años recientes y todavía estaremos recibiendo gratas noticias en este tema durante los meses siguientes.

Los edificios inteligentes han llegado para brindar mayor seguridad, unificar comunicaciones, mejorar la eficiencia, reducir el consumo y sobretodo brindar mayor comodidad a sus habitantes, visitantes y administradores.

Contáctanos para más información sobre soluciones de gestión de energía, iluminación, seguridad y automatización en:  ahorro@zegens.com  y al 664 337 8512.

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Rosamar Briceño

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